martes, 30 de abril de 2013

Carmen G. de la Cueva: "La tentación del fracaso"








 
La tentación del fracaso

 

Dicen que la soledad se hace rotunda
cuando uno escribe para entorpecer la muerte
y se suceden intentos por cobijarse en los precisos
contornos del abismo

entonces te preguntas
para qué nombrar el miedo
para qué las palabras como pasos
si son certeros los designios de la sombra

ya ves,
somos ceniza y escribimos los recuerdos como viejos
(con las manos hechas de memoria)
crecemos y de los sueños solo queda desaliento

Aprendimos que nombrar el tiempo significa
fragmentar la luz del horizonte.







lunes, 29 de abril de 2013

Antonio Di Benedetto: "La seducción"














La seducción



El hombre logra en sueños lo que no logró despierto: seducir a una mujer carnal, perfumada y esquiva.
Lo despierta un golpe en las costillas: la esposa, que duerme con él, le ha hundido el codo en el costado.
Ha soñado que el marido se ha dejado seducir por una mujer carnal, perfumada y esquiva, a quien ella no conoce.












domingo, 28 de abril de 2013

Juan Bonilla: "Canción de las sirenas"










Canción de las sirenas



Hay músicas que exigen de los ojos
se cierren como labios tras un beso
de despedida. Hay músicas que matan
como sobredosis de cocaína;
con esa lentitud de invierno dulce,
de soledad herida por fantasmas.

Nuevamente la lluvia me sorprende
oyendo la canción de las sirenas.
He cerrado los ojos y los labios.
Quisiera no tener que abrirlos más.
Esa tristeza está pidiendo a gritos
que alguien se muera por justificarla.





sábado, 27 de abril de 2013

Isabel González: "Numeración incorrecta"










Numeración incorrecta



"Un día me compraré un caballo de estos. Rosa y con alas", dice la niña y señala, en el libro abierto sobre sus muslos, la foto de un flamenco. El hombre, alentado por tanta inocencia, se quita la chaqueta, estrecha su acercanza y escarba los bordes de la hoja sesgada mientras le explica que alguien arrancó una página entre definición e imagen, que después del doce no viene el quince y que imagínate si Genghis Khan hubiera dominado Mongolia sobre un ave de tan frágiles patas. Como si la niña no supiera.
Como si no apretara en su puño la hoja extirpada. Como si las cosas no pudieran ser de otra forma.







viernes, 26 de abril de 2013

Juan Lamillar: "Objetos cotidianos"









Objetos cotidianos




Sólo existen objetos cotidianos:
son los que nos liberan de la muerte,
los que más tenazmente trazan lindes
entre la realidad y lo ficticio.
Son templos frente al tiempo,
y en su débil materia prevalecen.
La cerámica azul de los tinteros,
plumas antiguas, cajas venecianas,
relojes que negarán las horas.
Sólo esto existe: lo que me acompaña
en la magia distinta de este cuarto.
Libros y cartas, la música, las fotos.
Sólo esto existe: la ventana miente. 







jueves, 25 de abril de 2013

José de la Colina: "Eurídice"


 

 

 

 

Eurídice

 


Habiendo perdido a Eurídice, Orfeo la lloró largo tiempo, y su llanto fue volviéndose canciones que encantaban a todos los ciudadanos, quienes le daban monedas y le pedían encores. Luego fue a buscar a Eurídice al infierno, y allí cantó sus llantos y Plutón escuchó con placer y le dijo:
—Te devuelvo a tu esposa, pero sólo podrán los dos salir de aquí si en el camino ella te sigue y nunca te vuelves a verla, porque la perderías para siempre.
Y echaron los dos esposos a andar, él mirando hacia delante y ella siguiendo sus pasos...
Mientras andaban y a punto de llegar a la salida, recordó Orfeo aquello de que los Dioses infligen desgracias a los hombres para que tengan asuntos que cantar, y sintió nostalgia de los aplausos y los honores y las riquezas que le habían logrado las elegías motivadas por la ausencia de su esposa.
Y entonces con el corazón dolido y una sonrisa de disculpa volvió el rostro y miró a Eurídice.













miércoles, 24 de abril de 2013

José Mateos: "La palabra"









LA PALABRA


De nada han de servirte los versos que ahora escribas.
La emoción que tu pones en ellos te hacen digno,
pero nunca te salva, pues quedan apenas sin respuesta.
¿Acaso no comprendes que el silencio es más claro
y que con la palabra das distancia y concluyes
lo que siempre es comienzo, final, o nunca ha salido?

Mira tras la tormenta amanecer el día.
En las ventanas deja dorada luz el alba.
Tiemblan, sobre los charcos, las últimas estrellas.
¿Y ha de servirte a ti suplantar su hermosura?


(De "La poesía más joven, Una antología de la Nueva Poesía Andaluza", Qüásyeditorial, 1991)














martes, 23 de abril de 2013

Mario Benedetti: "Todo lo contrario"











Todo lo contrario



-Veamos –dijo el profesor-. ¿Alguno de ustedes sabe qué es lo contrario de IN?
-OUT – respondió prestamente un alumno.
-No es obligatorio pensar en inglés. En Español, lo contrario de IN (como prefijo privativo, claro) suele ser la misma palabra, pero sin esa sílaba.
-Sí, ya sé: insensato y sensato, indócil y dócil, ¿no?
-Parcialmente correcto. No olvide, muchacho, que lo contrario del invierno no es el vierno sino el verano.
-No se burle, profesor.
-Vamo a ver. ¿Sería capaz de formar una frase, más o menos coherente, con palabras que, si son despojadas del prefijo IN, no confirman la ortodoxia gramatical?
-Probaré, profesor: “Aquel dividuo memorizó sus cógnitas, se sintió fulgente pero dómito, hizo ventario de las famias con que tanto lo habían cordiado, y aunque se resignó a mantenerse cólume, así y todo en las noches padecía de somnio, ya que le preocupaban la flación y su cremento.”
-Sulso pero pecable –admitió sin euforia el profesor.





lunes, 22 de abril de 2013

Blas de Otero: "Tarde es, Amor"









Tarde es, Amor


 
Volví la frente: Estabas. Estuviste
esperándome siempre.
Detrás de una palabra
maravillosa, siempre.
Abres y cierras, suave, el cielo.
Como esperándote, amanece.
Cedes la luz, mueves la brisa
de los atardeceres.
Volví la vida; vi que estabas
tejiendo, destejiendo siempre.
Silenciosa, tejiendo
(tarde es, Amor, ya tarde y peligroso.)
y destejiendo nieve...






domingo, 21 de abril de 2013

Francisco Umbral: "Hoja de parra"










Hoja de parra 





Hoja de parra, otoño, candela del domingo, mi luz mientras escribo, hoja de bronce pálido, oro muy fatigado, y ese pétalo rojo, insinuado, insignia del domingo, ah parra en la ventana, residuo, menecita de niño, cuánto sol todavía –¿el sol es el tiempo?-, ya son las doce y media, mediodía, renuncio a lo perpetuo, sólo me ilustran luces, luminosos azares, escapadizos cielos.
Silencio. Cómo zumba el silencio en el silencio. Jardines en el sueño. Mientras escribo, insistente, niña, la hoja de parra o tiempo. Universo. ¿Dónde dejé mi cuerpo? Libros, revistas, fotos, todo lo que es fugaz. Afuera está el dinero. Es dinero de sol, de luz, de tiempo (de otro tiempo).
Afuera está el caudal de un domingo que pasa, lento como un trapero, llevándose las hojas del estanque, mi paso en el sendero, dejándose las llamas encendidas por todo el firmamento. Cómo hiere un domingo, cómo mata, quedo herido y perfecto. Salgo a respirar día, invierno venidero, salgo a la luz de una hoja tan dulcemente ardiendo.  Ah miles de domingos, cuchillo del recuerdo.
Muero.





(De "Un ser de lejanías", Ed. Planeta)



 

sábado, 20 de abril de 2013

Ángela Botero López: "Un día"








Un día



Un día
uno resuelve darlo todo
sin importar si es mucho.
Total,
uno tiene bastante
y hasta le sobra.
En cada cosa
va el alma entera,
inagotable, perfecta.

De todas maneras
cualquier tarde
la magia termina.
Se acaba.
Hay dentro un vacío.
¡Nada!
Hemos abusado y sin
presentirlo siquiera
estamos ahí,
a un lado
pero por ser como somos,
extendemos las manos
seguros de que todo
nacerá un día,
con el sol.
Muy temprano.







viernes, 19 de abril de 2013

Julia Otxoa: "Decorados"









Decorados


En aquellos días, los desesperados, que eran los más, se arrojaban de ventanas y balcones, ante la inminente llegada del juez que por impago de sus hipotecadas casas, ejecutaba de inmediato su desahucio.
De este modo, la justicia para hacer cumplir la ley caminaba sobre cadáveres, en una ciudad de aspecto lunar en la que la autoridad había dado orden de colocar maniquíes en las terrazas de las cafeterías y en las butacas de cines y teatros para lograr un cierto aire de normalidad, una vaga sensación de regreso a los luminosos días del pasado y la abundancia.







jueves, 18 de abril de 2013

Antonio Palacios: "No vine a hablarles del paso imparable del tiempo"




No vine a hablarles del paso imparable del tiempo



No vine a hablarles del paso imparable del tiempo.
De sus nostalgias o añoranzas.
Sino de las ruinas que deja a su paso.
Ese lenguaje casi indescifrable.
Todo aquello que una vez perdido,
jamás podremos recuperar.











miércoles, 17 de abril de 2013

Miguel A. Hernández Navarro: "Impasibles"











Impasibles

Ya no había soldados en la ciudad. Los tanques estaban vacíos. Ningún avión sobrevolaba ya los edificios. Habían pasado varios días desde que sonaron por última vez los antiaéreos. Sin duda, la paz había llegado a aquel lugar. Y, sin embargo, nadie salió a la calle para celebrarlo. Todos continuaron con sus rutinas, como si aquella última luz sobre el cielo no hubiera conseguido mostrarles la esencia destilada del género humano.












martes, 16 de abril de 2013

Juan Cruz López: "Eran las cuatro de la mañana"








Eran las cuatro de la mañana



Eran las cuatro de la mañana.
Estaba sentada en el sofá,
la cara hinchada, el pelo revuelto,
los ojos
casi cerrados.
Tenía en la mano
un paquete de galletas.
-Soñé que te morías -dijo,
y noté que había llorado.
La cogí de la mano
y la llevé a la cama.

A la mañana siguiente,
justo al despertar,
extendí mi mano y comprobé
que ya no estaba.
Se había ido al trabajo.
Entonces recordé
el sueño, mi mujer
sonámbula,
sentada en el sofá,
presa de una angustia ciega,
y sentí de golpe
el peso de su ausencia.

La amaba tanto que pensé
que había cosas peores
que la misma muerte. 






lunes, 15 de abril de 2013

Mar Horno García: "Locura familiar"









Locura familiar



Sus labios perfilados se contraen para dejar escapar un silbido corto. Parece fortuito pero sabemos que después se pasará un buen rato cantando. Seguimos a lo nuestro. Papá pega una nueva pieza en su maqueta absurda. Cándida enjuaga cansancio y platos en el fregadero. Mi hermana perfecciona su maledicencia con la vecina. Yo escribo. De pronto se deja oír un trino largo, un gorjeo maravilloso, quiebros imposibles, floreos, cascabeles, y, como todas las mañanas, vemos salir a mamá volando por la ventana. Volverá al atardecer para dormir en el perchero del dormitorio. Yo quería internarla pero papá fue categórico.
—¿Acaso no quieres ser tú poeta? Déjala a ella que sea pájaro.







domingo, 14 de abril de 2013

Isabel Tejada: "Lo que se esconde"









Lo que se Esconde




Desconfío de la falsa diplomacia como postura
instantánea ante el conflicto
El silencio inteligente no es otra cosa
que un tiburón negro
que aguarda tras la roca el olor de la sangre












sábado, 13 de abril de 2013

Octavio Paz: "El mono gramático"







El mono gramático



La diferencia entre la escritura humana y la divina consiste en que el número de signos de la primera es limitado mientras que el de la segunda es infinito; por eso el universo es un texto insensato y que ni siquiera para los dioses es legible.



 

viernes, 12 de abril de 2013

Francisco Ruiz Noguera: "La busca"


 

 

 

 

La busca

 


Miras y miras a ver qué se ha perdido:
esta casa es la misma,
el mismo sol cayendo a mediodía,
y el árbol –cuya sombra en los veranos
era el espacio de un salón sin muros-
es el mismo también. ¿Qué se ha perdido?

Miras y ves que sí, que falta algo.

Busca dentro de ti,
en la sección –repleta- de extravíos;
si allí no encuentras nada,
es que ya se ha perdido para siempre
lo que no está, y que tú
–aunque no sabes qué- sabes que estaba.





jueves, 11 de abril de 2013

Armando José Sequera: "La tatarabuela Felicia"











La tatarabuela Felicia



La tatarabuela Felicia fue la mujer más mujer de la familia.
Era muy inteligente y bella según los cuentos del tío Ramón Enrique y un retrato que cuelga en la sala.
Un día, en medio de una de las tantas guerras y revoluciones que hubo en el país en los últimos años del siglo XIX, unos soldados pasaron por la casa de la familia y, como los hombres no quisieron incorporarse a su ejército, decidieron matarlos.
Antes de hacerlo, los soldados les dijeron a las mujeres de la casa que podían irse con lo que llevaran encima, que con ellas no se meterían.
Por idea de la tatarabuela Felicia, cada mujer salió cargando a su marido, a su hermano, a su padre o a su hijo y entonces los soldados se quitaron las gorras, se rascaron las cabezas y se fueron para siempre con las caras rojas y los corazones chiquiticos.






miércoles, 10 de abril de 2013

Isabel Escudero: "Adivinanzas"



 

 

 

Adivinanzas

 


Claro que es verdad que tú le miras,
claro que es mentira que te ve,
claro que es igual el dos que el uno,
claro que está claro que eres él.

(El espejo)

Pensando en el invierno
luchan a espada
los dos guerreros.

(Las agujas de hacer punto)





 

martes, 9 de abril de 2013

David Lagmanovich: "Escrituras"











Escrituras



La línea levantó la cabeza y me mordió la mano con que la escribía. Comprendí que mi obsesión con el microrrelato era excesiva y me puse a escribir un cuento de extensión convencional. Un párrafo se enroscó y saltó hacia mí, hiriéndome en el calcañar con su cola ponzoñosa. Entonces me instalé en el territorio más conocido de la novela. Algunos capítulos suscitan mi desconfianza. Vivo inquieto, maquinando estrategias para proteger la yugular.








lunes, 8 de abril de 2013

Itzel Dayan Casaña Flores: "Eso que no es nada"


 

 

 

Eso que no es nada

 


Cómo explicar lo que no he visto,
no ha nacido,
no tiene voz,
nunca se ha dicho.

No es de memoria,
eso que siempre nadie ha leído y está escrito.

Es eso que se dicen en secreto las manzanas.

Tan ligero como el aire que respiran los peces,
arrulla a las mariposas en crisálidas,
muere cuando lo toca el viento.

Parece no ser nada,
nota que se vuelve dolor.

Pero lo siento cuando está sobre mí tu mirada.