Vuelta de paseo
Asesinado por el
cielo.
Entre las formas que
van hacia la sierpe
y las formas que
buscan el cristal,
dejaré crecer mis
cabellos.
Con el árbol de
muñones que no canta
y el niño con el
blanco rostro de huevo.
Con los animalitos de
cabeza rota
y el agua harapienta
de los pies secos.
Con todo lo que tiene
cansancio sordomudo
y mariposa ahogada en
el tintero.
Tropezando con mi
rostro distinto de cada día.
¡Asesinado por el
cielo!
Impactamte, Manuel.
ResponderEliminarBello homenaje, besos.