El mono gramático
La diferencia entre la escritura humana y la divina consiste en que el número de signos de la primera es limitado mientras que el de la segunda es infinito; por eso el universo es un texto insensato y que ni siquiera para los dioses es legible.
Me ha gustado mucho esta entrada tuya, con las palabras de Octavio, me parece genial, un abrazo, Manuel y besos a grades dosis.
ResponderEliminarOctavio Paz ¡UN MAESTRO !! Muy linda entrada.
ResponderEliminar¡Buen fin de semana !!
Besos de luz.