Eran labios oscuros y palabras oscuras.
Inventarios dormidos y balanzas de dudoso equilibrio.
Eran pasos cruzados y sueños y vigilias. Y vigilias
perdidas y sueños restaurados. Eran mapas y mapas.
Ciudades y secretos. Un forastero hablando de la vida.
Era la vida. Una guerra mundial en un retrato
en que mi madre está triste y yo estoy muerto.
Era un caballo blanco y un número infinito.
El juicio de la noción y de la máscara.
Noción del cielo máscara de un dado.
Era mi hermano que me iba a perdonar
pero no entonces sino un día.
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