OPINIÓN SOBRE LA PORNOGRAFÍA
No hay
mayor lujuria que el pensar.
Se
propaga este escarceo como la mala hierba
en el
surco preparado para las margaritas.
No hay
nada sagrado para aquellos que piensan.
Es insolente
llamar a las cosas por su nombre,
los
viciosos análisis, las síntesis lascivas,
la
persecución salvaje y perversa de un hecho desnudo,
el
manoseo obsceno de delicados temas,
los
roces al expresar opiniones; música celestial en sus oídos.
A plena
luz del día o al amparo de la noche
unen en
parejas, triángulos y círculos.
Aquí
cualquiera puede ser el sexo y la edad de los que juegan.
Les
brillan los ojos, les arden las mejillas.
El
amigo corrompe al amigo.
Degeneradas
hijas pervierten a su padre.
Un
hermano chulea a su hermana menor.
Otros
son los frutos que desean
del
prohibido árbol del conocimiento,
y no
las rosadas nalgas de las revistas ilustradas,
pornografía
esa tan ingenua en el fondo.
Les divierten
libros que no están ilustrados.
Sólo
son más amenos por frases especiales
marcadas
con la uña o con un lápiz.
(De “Gente en el puente", 1986)
No hay comentarios:
Publicar un comentario